Trigo limpio 
Maria Manuela ...¿Me escuchas? Yo, de vestios, no entiendo:
pero...¿te gusta de veras ese que te estás poniendo?
Tan fino, tan transparente, tan escaso y tan señío
que, a lo mejó por la calle, te vas a morí de frío.
Te sienta, que eres un cromo, pero, cambiate de ropa...
Si es un instante...Lo justo, mientras me acabo esta copa.
Ponte er der cuello serrao que te está de maravilla
y que te llega dos cuartas...por debajo de la rodilla.
Cada vez que te lo pones te encuentro tan elegante
que dentro de mí murmuran los duendesillos der cante:
"La rosa que me entregaron ar pié del artá mayó,
lleva las sayas cumplías y nadie le ve er coló".
Pero antes de que te vistas, coge un poco de agua clara
y afuera los meringotes que te embadurnan la cara.
¡Ni mas carmín, ni mas cremas, ni mas tintes en er pelo!
¡No te aguanto mas colores que lo que te puso er Sielo!
¡Se acabó enseñá las piernas y los brasos y el escote!
¡Y el rostro... no te lo pintes...ni aunque te sarga bigote!...
- Clásicos populares -
INICIO
|